Emprender después de los 50 años parece ser cada vez más popular y frecuente de lo que los medios de comunicación usualmente difunden. Tenemos la idea de asociar un emprendedor exitoso con un joven que emprende con una startup de tecnología y crece muy rápidamente con un impacto hasta global, pero un ejemplo es en Estados Unidos donde la tasa más alta de emprendimiento se encuentra entre las edades entre 55 y 64 años y los mayores de 55 años tienen el doble de probabilidades de abrir nuevas empresas exitosas que los jóvenes entre 20 y 34 años según la Harvard Business Review.
Las motivaciones principales para tomar la decisión de convertirse en emprendedor a los 50 años radica principalmente en la necesidad de un cambio de vida laboral, ser jefes de sí mismos y hacer lo que más saben y disfrutan hacer, teniendo en cuenta que es una generación que se ha adaptado a la tecnología y la usa en sus rutinas diarias, generando una nueva ola de emprendedores que vienen a darle otro nuevo significado al rol del emprendedor, que quiere aportar al mundo con la madurez y experiencia de los años. Ejemplos muy reconocidos de empresarios que abrieron sus negocios después de los 50 años son: Harland Sanders abrió su primer KFC a los 65, Ray Kroc fundó McDonalds a los 52 y y Jhon Pemberton fundador de Coca Cola a los 55.
Por eso quiero reunir algunas de las razones por las cuales es bueno emprender a los 50s:
- Amplia experiencia y conocimiento: A los 50 años, las personas tienen una amplia experiencia en su carrera profesional y en la vida, que los beneficia con tener una perspectiva más amplia de los negocios y la capacidad de tomar decisiones más informadas.
- Mayor resiliencia: los años trae consigo tener experiencias muy exitosas y otras en las que se ha experimentado la frustración, pero al lidiar con las subidas y bajadas de la vida y el trabajo, se fortalece la resiliencia que es la capacidad de superar los momentos difíciles y aprender de ellos.
- Red de contactos: más años más amplia la red de contactos y se valora mucho esa red de solidaridad y apoyo entre los amigos y conocidos emprendedores y empresarios, se sabe que las buenas relaciones y la credibilidad es un factor que impulsa los negocios, facilita hacer alianzas y conseguir recursos.
- Estabilidad financiera: A los 50 años, se suele tener menos miedo al fracaso, tener menos obligaciones financieras y familiares y se puede disponer de unos recursos económicos para invertir y la evaluación financiera de un proyecto lo hacen con un mejor criterio del riesgo y la confianza en qué puede ser beneficioso.
- Menos obligaciones familiares: muchas personas ya tienen hijos mayores que les permite dedicar más tiempo y energía a su negocio.
- Motivación laboral renovada: muchas personas replantean sus objetivos en la vida en esta etapa y si llevan años trabajando como empleados quieren trabajar con autonomía y en lo que más saben y disfrutan hacer, si ya lo hicieron para otros ahora lo quieren hacer para ellos mismos.
- Capacidad de aportar al mundo: muchos se dan cuenta que todo el conocimiento y experiencia que han ganado lo pueden poner al servicio y beneficio de los demás y pueden aportar al mundo con negocios más sostenibles social y medio ambientalmente. Hay una necesidad mayor de dejar una huella o un impacto positivo, a trabajar desde su misión.
- Confianza en liderar un proyecto o negocio: para muchas personas ya han liderado equipos de trabajado, sacado adelante proyectos empresariales o dirigido áreas, departamentos o empresas, que les ha dado la oportunidad de fortalecer sus competencias como líderes y su capacidad para administrar los recursos de la empresa.
Emprender a cualquier edad significa asumir riesgos y no es garantía que con mayor experiencia, conocimientos y recursos se logre el éxito en los negocios, pero en la década de los 50s emergen muchos emprendedores. Me encantaría que me compartieras tu experiencia y visión de por qué es bueno emprender a los 50 años.